Viernes 5 de Agosto
¡Buen día! ¿Cómo les va? ¡Qué semanita tuvimos! Esta vez salimos el viernes para no escaparle a la coyuntura y aprovechar a conversar sobre el tema de la semana. Y gran momento elegí que, mientras desayunaban leyendo este newsletter, empezó a resonar quien será el esperado vice ministro de economía, Gabriel Rubinstein.
Massa, un Superministro con superdesafíos
Tras algunas semanas de especulaciones, el día de ayer asumió Sergio Massa como “superministro” de Economía, haciéndose cargo de las carteras de Economía, Desarrollo Productivo y Agricultura, Ganadería y Pesca. De esta forma, tras alrededor de 3 meses de cambios en el gabinete, se reconfigura la gestión de la economía y la distribución de poder dentro de la coalición de gobierno.
Post asunción, anteanoche el nuevo ministro anunció en conferencia de prensa las primeras medidas, que van a ser los pilares de su gestión y van a dar forma a sus primeros días al frente del ministerio. De forma esquemática, presentó un programa con cuatro principios: orden fiscal, superávit comercial, fortalecimiento de reservas y desarrollo con inclusión. Cada uno de ellos envolvió un punteo de medidas que en su conjunto apuntan sin grandes transformaciones a dar una sensación de mayor estabilidad y orden sobre una economía que en las últimas semanas se mostró frenética.
¿De qué va a ir el #CadenadeValor de hoy? Repasar las medidas una por una y analizar sobre su posible éxito/fracaso o sobre su impacto me parece innecesario. Es un ejercicio especulativo que, en el mejor de los casos, estaría basado en prejuicios. Además, considerando que para muchas de las medidas anunciadas el tiempo de ejecución es relativamente corto, prontamente podremos analizarlas desde sus resultados más que desde sus enunciados. Por último, creo que es difícil imaginar que estas serán las únicas medidas que vaya a tomar Massa al frente del Ministerio, por lo que tampoco pretendo especular sobre los potenciales impactos de un plan incompleto.
El recorrido que vamos a hacer hoy es inverso: vamos a enfocarnos en los principales desafíos con los que se encontrará Massa al asumir y que enfrentará la economía en su conjunto en los próximos meses. En ese camino, vamos a tomar algunas de las medidas anunciadas para ahí sí analizarlas y ver de qué forma apuntan a dar respuesta a esos desafíos. Y obviamente, de más está decirlo, siempre con el sesgo que caracteriza a este espacio: el foco puesto en cómo se vinculan esos desafíos con el mundo productivo.
El problema que atraviesa Argentina en estos momentos no es novedoso. Si uno repasa la historia económica de nuestro país, se encuentra con varios episodios similares que, con distinto orden de magnitud y de gravedad, son el reflejo de problemas similares. Hoy Argentina enfrenta un problema de “doble brecha”, similar al desarrollado para los 80s por Fanelli, Frenkel y Damill: se enfrenta un problema de brecha fiscal y brecha externa, donde existe una dinámica de retroalimentación entre ambas y que obliga a la política económica a tomar constantemente medidas para ajustar clavijas en pos de cerrar una que desbordan la otra y viceversa.
En ese sentido, el plan presentado por Massa apunta a ambas brechas a la vez y es un reflejo de los dos grandes desafíos de largo plazo que deberá enfrentar: por un lado, ordenar las cuentas fiscales y reducir su dependencia del financiamiento monetario que presiona sobre el frente externo; y por otro, incrementar la disponibilidad de divisas que alivien el desequilibrio externo y las presiones devaluatorias.
Vamos con el primer punto: ordenamiento fiscal. En su discurso de asunción, fue el primero de los principios del plan económico que presentó Massa. El foco está puesto en el tema subsidios a las tarifas: con la segmentación que se viene implementando y que Massa sostendrá, se podría alcanzar la meta de déficit dentro del acuerdo con el FMI. Este es el nudo fundamental de la política energética reciente en Argentina. Cerrada la segmentación, cerca de 4 millones de hogares (un 23% del total) dejarán de recibir subsidio y otros 9 millones tendrán una reducción parcial del mismo.
Pero al mismo tiempo, Massa anunció medidas adicionales sobre este grupo mayoritario: se promoverá el consumo eficiente reduciendo el subsidio sobre el consumo que exceda los 400 kW al mes. De acuerdo a los números detallados hoy por la portavoz de la Presidencia, Gabriela Cerruti, el 80% de estos 9 millones de hogares tienen un gasto inferior a este nivel y no estarían alcanzados por esta medida adicional. Si bien el consumo energético entre los hogares de ingresos medios no es estrictamente lineal (más por el tamaño de los hogares y la disponibilidad o no de gas en el hogar, que por el efecto de la eficiencia energética de los electrodomésticos de hogares más ricos), el esquema de segmentación seguiría siendo más progresivo que el anterior, de gran sesgo pro-rico, considerando que los hogares más ricos pagarán tarifa plena. Restará ver si esta medida adicional alcanzará o no a los hogares de menores ingresos que mantienen la tarifa social, algo que no terminó de quedar claro con los anuncios de ayer.
El otro tópico de medidas anunciado para el frente fiscal es el abandono del financiamiento del Banco Central al Tesoro vía adelantos transitorios, y la financiación del déficit a través del mercado de deuda. Sin entrar en detalles de los aspectos macro-financieros, no quería dejar de mencionar uno de los “anuncios no anunciados” más importantes del miércoles: financiarse en el mercado probablemente demande un incremento de las tasas de interés que tendrá impacto sobre toda la economía, lo que implicaría para las empresas tener que convivir con un financiamiento más caro.
El segundo punto es el ordenamiento externo. En este aspecto, el desafío es tanto de stocks como de flujos: se necesita engrosar las reservas internacionales del Banco Central para asegurar la estabilidad de corto plazo; pero al mismo tiempo, se necesita dar vuelta de forma estructural la balanza externa que continúa desangrando las reservas. En el primer aspecto, Massa aseguró que se acordó en los próximos 60 días un adelanto de exportaciones fundamentalmente por parte del sector agroindustrial por un total de USD 5.000 millones, además de algunos desembolsos en negociación con organismos internacionales. Este adelanto daría oxígeno al frente externo en el corto plazo, pero por sí solo no resuelve la brecha externa; no deja de ser un adelanto, y si bien engrosar las reservas puede servir para alejar miedos devaluatorios y con eso alentar el ingreso de divisas, esos dólares con los que se contará hoy serán dólares que no ingresarán mañana.
En ese sentido, se necesita también mejorar el flujo de divisas para que el BCRA deje de perder reservas todos los días. Ahí se destacan dos políticas pro-exportadoras anunciadas ayer: los regímenes especiales de liquidación de divisas para agro, minería, hidrocarburos y economía del conocimiento; y un esquema de créditos y garantías para primeros exportadores. La última es una medida positiva, pero que difícilmente mueva la aguja en el corto plazo para el número macro; respecto a la primera, extiende el régimen previamente anunciado para el agro a otros sectores, que buscan generar exportaciones en el corto plazo, un desafío más que difícil.
De acuerdo a los anuncios, el foco está puesto en sectores específicos con potencial de alto impacto en el corto plazo, buscando agregar riqueza sobre los recursos disponibles: “energía, proteínas, minerales y capital humano” en palabras de Massa, y uno de los grandes puntos de la agenda que proponemos desde Misión Productiva. Qué tan rápido puedan impactar en cada uno de ellos varía según el sector y depende de cuánto logre incentivar la inversión para incrementar la oferta: en hidrocarburos aún existe capacidad ociosa en el sistema de transporte de petróleo, por lo que si se perforan nuevos pozos se podría ver un impacto significativo, aunque no inmediato; en el caso minero los proyectos de inversión demoran más tiempo, por lo que su impacto de corto plazo sería más acotado; los servicios basados en conocimiento, por su parte, son un sector con capacidad de escalar exportaciones rápidamente, aunque vería más probable que el efecto de la medida vaya por llevar al mercado oficial parte de las exportaciones que actualmente se hacen a través del mercado paralelo con cuentas en el exterior; finalmente, desde el agro cuando se anunció el régimen la semana pasada se recibió con cierto escepticismo, aunque cabe destacar que su impacto financiero para el productor sería similar a una quita de retenciones.
Estos son los principales desafíos que deberá enfrentar Massa desde el punto de vista económico y productivo para ordenar algunos de los grandes desafíos de mediano y largo plazo. Esto no quita que, de igual manera, deberá enfrentar el gran desafío de corto plazo de generar un horizonte de expectativas para todos los agentes económicos. En sus palabras, resolver la incertidumbre que produce que “las cosas no tengan precio”. Despejar estas dudas, en buena medida, dependerá de la recepción que tengan aquellas medidas anunciadas de impacto más inmediato, y de otras medidas que las acompañen. Algo que seguramente estaremos siguiendo en próximas ediciones del newsletter.
Si querés saber más del tema, te dejo algunas cositas que te pueden llegar a interesar:
Si querés leer sobre los vericuetos políticos detrás de la llegada de Sergio Massa al gabinete, obviamente te recomiendo que lo leas a Iván Schargrodsky en su #OffTheRecord de este martes.
Para ver la conferencia de prensa completa del nuevo Ministro de Economía, podés encontrar el link acá, en el canal de YouTube de Casa Rosada.
Otros temas para seguir de cerca:
No quise extenderme sobre el tema, pero uno de los principales puntos a seguir es el armado del gabinete del nuevo Ministerio de Economía. A lo largo de la semana, Sergio Massa anunció varios de los integrantes, los cuales pueden encontrar en este hilo en su cuenta de Twitter. Restan ocupar dos posiciones importantes: por un lado, la Secretaría de Política Económica, que deberá llevar adelante el plan macroeconómico. Por otro lado, la Secretaría de Energía: a las horas en que se cerraba este #CadenadeValor se confirmaba la renuncia de Darío Martínez al cargo, por lo que aún restará definir quién será el encargado de implementar efectivamente la segmentación tarifaria dispuesta por el gobierno.
A nivel internacional, se registraron dramáticas subas en el precio del Gas Natural Licuado. En el marco de un anuncio de recorte de suministros a Europa por parte de Rusia, los precios en el Viejo Continente llegaron hasta los US$ 60 por MMBTU, niveles que no alcanzaba desde marzo, mientras que en Asia alcanzó los US$ 52 MMBTU. Hoy Rusia está proveyendo a Europa cerca de un tercio de los niveles normales de gas natural, mientras que la Unión Europea acordó un plan para reducir el consumo de gas de cara al invierno.
Autobombo #1: la semana de Misión Productiva.
La semana pasada publicamos una nota sobre la evolución que han tenido las tecnologías verdes a nivel global, escrita por Franco Mendoza, que resulta crucial para entender hacia dónde se enfoca hoy el interés de la ciencia y la tecnología en materia de sostenibilidad.
También les dejo el link a una nueva edición de Diálogos Productivos, con Mariano Percivale, quien fundó la marca Chanvre y fabrica anteojos elaborados con insumos derivados del cáñamo y aspira a diversificarse en la producción de otros bienes a partir de la promulgación de la Ley de Cannabis Medicinal y Cáñamo Industrial.
Por otro lado, les comparto el artículo que escribí para Ciclos.ads sobre industria y cambio climático, enfatizando en los desafíos y los aportes que puede hacer el sector industrial para cumplir las metas de reducción de emisiones a las que se comprometió nuestro país.
Finalmente, el lunes tuvimos una nueva cena de Misión Productiva en la que nos juntamos a conversar sobre el contexto económico y geopolítico a nivel global, con Martín Schapiro como protagonista, para debatir sobre los desafíos que este contexto genera para nuestro país y para la región.
Un abrazo y nos leemos en dos semanas.
Pablo
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